Huatusco,
Ver. 10 de diciembre 2017
Por
Sarai Xaca Solábac
Con una inolvidable y
original fiesta de cumpleaños, se efectuaron los 15 años de la encantadora
Bertha de los Ángeles Purroy González. Ataviada elegantemente con espectacular vestido
llegó hasta la capilla del Tepeyac, donde fue recibida con alegría y cariño por
el párroco José Crisóforo Garrido Vázquez.
Felices y agradecidos con el Creador, sus padres Doctor Rubén Purroy
y Carmen Julia González de Purroy, quienes con gran ilusión, contemplaban el
bello rostro de su hija que denotaba alegría y amor a raudales. Acompañaron a
Bertha sus padrinos Jacobo Sánchez y Maribel Alvarado, estimado matrimonio con
quienes les unen grandes lazos de amistad.
Emotiva ceremonia religiosa,
donde el sacerdote habló de los múltiples sentimientos que se conjugan en la
llegada a esta etapa de la vida, donde
todas las jovencitas tienen grandes sueños y esperanzas. Invitó a los presentes
a orar por la felicidad de la quinceañera.
Posteriormente los invitados
se congregaron en el salón social del SETSE, el cual fue bellamente adornado
para tan especial ocasión, la originalidad y el buen gusto resaltó en cada una
de las mesas y en la mesa principal, asimismo; la mesa de dulces fue elegantemente adornada
con exquisitos dulces tradicionales.
La presentación de la feliz
debutante estuvo llena de emotividad y cariño, frases llenas de sinceridad y
sobre todo, desde lo más profundo del alma. Los invitados felices de compartir
estos grandes momentos, unieron sus deseos de felicidad al brindar por la
hermosa Bertha de los Ángeles.
Una de las partes más emotivas,
fue cuando la feliz quinceañera bailó su vals con su señor padre, Doctor Rubén
Purroy, donde los sentimientos se desbordaron al contemplar tan emotiva escena,
por igual, cuando tocó el turno a su hermano Eduardo, quien orgullos y feliz
abrazó a su hermana y al ritmo de la música la condujo al compás de las bellas
notas musicales.
Noche de magia y ensueño,
donde Bertha de los Ángeles, bailó sus demás coreografías con sus chambelanes, demostrando sus atributos para el baile, haciendo
muestra de gracia y destreza en cada uno de sus movimientos.
Deliciosa cena fue servida a
los invitados acompañada de exquisitos vinos, quienes degustaron de las sabrosas
viandas que se cocinaron para tan
significativa ocasión.
Finalmente el baile, donde
un grupo de la capital del estado, impuso su alegría y versatilidad logrando un
ambiente lleno de felicidad. La fiesta se prolongó hasta la mañana siguiente.
La feliz quinceañera agradecida con las personas que la acompañaron en estos
inolvidables momentos, agradecida con Dios por el don de la vida y agradecida
con sus padres por el profundo amor que le tienen, por la responsabilidad de
guiarla con principios y valores; y por ser los mejores padres del mundo.
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